Habiendo pasado ya el ecuador de agosto, y viendo como se acerca irremediablemente el final de las vacaciones, tanto para los padres como para los niños, toca ir preparándose para la vuelta al trabajo y para la vuelta al cole, uno de los momentos más dolorosos tanto para adultos como para pequeños. Aunque los segundos tienen bastante más suerte ya que, a pesar de que la vuelta al cole no deja de ser traumática, estrenarán multitud de material escolar con el que aliviar en parte esa angustia por retomar las obligaciones. Mochilas, estuches, lápices, portabocadillos, sandwicheras… Muchos son esos artículos tan necesarios para que nuestros hijos den el callo en el colegio, y casi todos ellos se han de comprar de nuevo con cada vuelta al cole. Por eso es mejor adquirirlos cuanto antes, si todos estamos preparados antes de que finalicen las vacaciones, la transición hacia las labores escolares siempre será menos dolorosa.

Seguro que si hacéis recuento de todas las cosas que necesitan vuestros hijos para prepararse para la vuelta al cole salen siempre las más habituales. Aparte de los libros, necesitan una buena mochila en la que llevarlos. Y a ser posible con ruedas, así evitarán lastimarse la espalda con todo el peso que acarrea cargar con ellos. Así que, ¿qué tal una mochila de Bob Esponja en color verde y naranja? Es uno de los personajes favoritos de todos los niños, su simpatía va mucho más allá de la serie de televisión. Y si hablamos de dibujos animados y vuelta al cole, no puede faltar la mochila con carro de Dora la Exploradora, un personaje presente en la imaginación de casi todas las niñas y con el que también podrán regresar al colegio. ¿Y qué falta para completar el material escolar más básico después de las mochilas? Los estuches suelen ser esos artículos, necesitando que la imagen y el estilo en los que se basan sea acorde con los gustos de los niños. El estuche plano de las Divinas podría ser la mejor elección para una niña enamorada de el Patito Feo, o un estuche portatodo de Bakugan si nos referimos a los niños. Y para completar los accesorios más imprescindibles en toda vuelta al cole, favoreciendo la conservación del medio ambiente, prescindamos del papel de aluminio con el que envolvemos los bocadillos de los niños y utilicemos los portabocadillos de diseño estampado. Fáciles de llevar, reutilizables, divertidos… Son mucho más prácticos que cualquier otro tipo de envoltura, y también se pueden adaptar a los gustos de los más pequeños.

Estos son sólo algunos ejemplos, en realidad prepararse para la vuelta al cole no es tan sencillo como disponer de todos los accesorios necesarios y que más gustan a los más pequeños. Sobre todo necesitan comprensión, cariño y que valoremos el esfuerzo diario por obtener grandes resultados, sólo así alejaremos el fantasma de la vuelta al cole transformándolo en un simple reencuentro. Con los profesores, el colegio y, sobre todo, con sus amigos.