Se aproxima la fecha más romántica del año: San Valentín. Poco importa que nos resistamos con la excusa de que es un día inventado para vender, tarde o temprano tendremos que comprar algún detalle para nuestra pareja. Tampoco tiene porque ser por obligación, pero nadie puede negar que le gusta que se acuerden de él en un momento tan señalado. San Valentín es todo el año, sí, pero sólo un día en el que el detalle es relativamente importante. No nos engañemos: nuestra pareja está esperando que nos acordemos.

Tampoco hace falta gastarse mucho dinero para conseguir un detalle que despierte los sentimientos que a veces se duermen con el paso del tiempo. Este es el caso de las felicitaciones de San Valentín, una exquisita forma de decir «te quiero» y condensar en una imagen todo ese cariño que no solemos expresar habitualmente. Románticas, de colores vivos, con unos diseños elegantes y acompañadas de expresivas palabras como dedicatoria, así son nuestras felicitaciones de San Valentín. Con unos labios en rojo para que no olvidemos todos esos besos que se quedaron en el camino, con un salero y pimentero como imagen de la vida en pareja, un abrazo junto al mar como muestra de un amor eterno… Las felicitaciones de San Valentín son tan variadas como las propias parejas, pero todas con algo en común: unir a los enamorados por un día y que esos recuerdos permanezcan toda la vida.