Ya estoy aquí otro lunes para traeros el accesorio para mascotas más perro de la semana, ese artículo perfecto para dueños y sus animales de compañía que sólo puede recomendar alguien que sabe cómo es de primera pata: yo. Vale, puede parecer algo presuntuoso por mi parte, pero no negaréis que no hay nadie mejor para probar un accesorio para perros que un perro. Es algo tan obvio como los dientes de un Rottweiler. O como contarle las patas a un gato. O… Bueno, creo que ya ha quedado claro que yo soy la mejor para hablar de lo que pienso presentaros hoy: el hueso interactivo con comida. ¿Existe un juguete mejor que uno que también incluya comida? Para cualquier perro es un sueño hecho realidad, ya os lo digo yo.
Es pensar en huesos con comida y ya se me hace el hocico saliva… ¿Por qué será que a los perros nos mueve el estómago? Eso no quiere decir que estemos continuamente pensando en comida, aunque no he de negar que es uno de nuestros principales pensamientos. Pero no porque queramos, sino por instinto. Al fin y al cabo, el alimento es lo que ha facilitado a todos los animales la supervivencia, y las mascotas no nos hemos acabado de acostumbrar a que nuestros dueños nos den de comer de forma periódica. Igual que ellos tampoco se acostumbran a caminar de pie y por eso tropiezan con tanta facilidad cayendo al suelo…
Volviendo al tema que nos ocupa, el juguete para perros que os propongo hoy guarda lo bueno de los dos mundos: juego y comida. Por un lado, posee una forma divertida y resistente para aguantar los colmillos. Y por otro, permite que se le enganchen snacks para así servir de recompensa ante cualquier buen comportamiento. ¿Quién no querría jugar con algo así? Todos los perros, el hueso interactivo con comida es irresistible para cualquier raza, incluso para aquellas que no les da el hocico para morderlo. Pero sí para comerse los snacks, eso seguro.