Todo acaba volviendo, eso es algo a lo que estamos acostumbrados en la moda. Y lo que no tiene que ver estrictamente con la manera de vestir ya que, por mucho que no lo pudiéramos creer hace unos años, las costumbres de nuestras madres vuelven con fuerza, como la de recuperar los carros de la compra. No sabemos bien si es como excusa de la ecología o de la crisis que ha acabado por inundarlo todo, pero el caso es que casi todos los supermercados están restringiendo el uso de bolsas de plástico, teniendo que buscar alternativas al transporte de nuestras compras. Esas alternativas siempre han estado ahí, lo que ahora se impone son carros de la compra modernos, que hagan algo más aparte de sustituir a las bolsas.
Las marcas se han empeñado en renovar la clásica imagen del carrito de la compra, el cual se tiraba de un asa transportándose el contenido gracias al uso de dos ruedas. Evidentemente, el mecanismo sigue siendo el mismo habiéndose innovado gracias al uso de materiales más ligeros y resistentes, armazones plegables que facilitan la tarea de encontrarle un hueco en casa al carro de la compra e, incluso, incluyendo una silla, también plegable, para momentos en los que ya no podamos con nuestro carrito. Todo para facilitarnos la tarea de volver del supermercado.
Sean cuales sean las motivaciones para eliminar las bolsas de plástico de los supermercados, lo cierto es que ello conlleva un ahorro energético y ecológico muy alto. También acarrea pequeños inconvenientes que, gracias a los modernos carros de la compra, podemos solucionar fácilmente. Además, la inversión no tarda en amortizarse. También para el Medio Ambiente.
