Si preguntáramos a las familias cuál es la mascota que tienen en casa, está claro que aparecerían dos de forma mayoritaria: los perros y los gatos, compañeros de los humanos desde hace miles de años con los que hemos compartido desde trabajos al propio techo bajo el que nos hemos cobijado. De estos dos, los perros son los animales de compañía más populares entre las familias, su carácter más abierto y juguetón consigue que podamos interactuar con ellos de una forma mucho más natural, casi de la misma manera que lo haríamos con otra persona. ¿Y qué pasa con los gatos? Más independientes que los perros, introvertidos y con menor tendencia al movimiento, siempre están en la cabeza de aquellas personas que buscan una mascota mucho más calmada y con menor dependencia de la familia. ¿Significa esto que aporten menos diversión o cariño? Por supuesto que no, cada animal es diferente y, por personalidad, se comportarán de una manera o de otra, aunque siempre devolviéndonos su cariño de forma tan incondicional como les brindamos el nuestro. Sobre todo a la hora de jugar, los juegos para gatos y para perros tampoco se diferencian tanto. Al fin y al cabo, ¿no se trata sólo de divertirse?

Los felinos son expertos en acechar y acercarse sin hacer ningún ruido, por eso todos los juegos para gatos suelen centrarse en estos dos aspectos. Y tampoco es necesario un juguete excesivamente complicado para jugar con ellos, basta una cuerda o cualquier objeto adaptado a su seguridad y que puedan perseguir, así de sencillo. Esconderse detrás del sillón y tenderle la cuerda a nuestra mascota sin que nos vea, esperar a que se prepare y lanzarle una pelota para perseguirla, camas y lechos con tejado resistente que puede escalar con ayuda de sus uñas… Así son los juegos para gatos, seguro que todo aquel que tiene uno ha jugado alguna vez de esta manera con ellos.

Temperamentales, explosivos, insistentes… Todas estas conductas confluyen en los juegos para gatos, suelen mostrar su instinto tanto a la hora de jugar como de comer o hacer cualquier otra actividad. Y hemos de tener bien en cuenta que los gatos no jugarán siempre que a nosotros nos apetezca, pueden resultar bastante esquivos cuando se lo proponen. Pero si realmente quieres disfrutar de todos esos juegos para gatos con los que estimular y entretener a tu mascota, existen juguetes y accesorios para ella que le harán pasar un buen rato. También a ti, esa es la grandeza de compartir la vida con un animal.