Tras las deliciosas judías con almejas de ayer, vamos hoy con un plato igual de rico, aunque con un ingrediente principal que no suele ser habitual en los menús diarios: Conejo guisado al vino blanco. Ya sabéis que en segundos platos siempre suele ser corriente el uso de carnes y de pescados, aunque la de conejo tampoco tiene  el exceso de calorías que podrían tener otras carnes, consiguiendo que este plato resulte bastante sano y nuritritivo. Así que… ¿Queréis prepararlo? Si nunca habéis cocinado conejo o hace bastante tiempo que no frecuenta vuestros platos, esta es vuestra receta. Y si no, también, que se merece con creces estar entre los ingredientes habituales de nuestros menús.

Conejo guisado al vino blanco.

Dificultad: fácil.
Tiempo de preparación: 1 hora.

Ingredientes para cuatro personas.

• 800 gramos de conejo troceado.
• 2 dientes de ajo picado.
• 100 mililitros de aceite de oliva.
• 1 cebolla mediana.
• 1 taza de vino blanco.
• 100 gramos de zanahoria cortada a dados pequeños.
• Sal y pimienta.

Para la picada:

• 1 rebanada de pan.
• 4 almendras tostadas.
• Perejil picado.

Preparación.

Ponemos una cacerola al fuego vivo con el aceite y freímos la rebanada de pan. La sacamos y la reservamos para preparar la picada. En el mismo aceite, doramos bien los trozos de conejo por ambas caras, previamente salpimentados, y los retiramos de la cacerola, reservándolos también. A continuación, sofreímos ligeramente el ajo picado y después la cebolla, también picada. Dejamos que esta poche a fuego lento hasta que adquiera un color dorado y añadimos la zanahoria, dejando que esta tome color. Cuando todo el conjunto esté bien pochado, añadimos el vino blanco y dejamos que se evapore completamente, pasando a colocar los trozos de conejo y cubriendo todo con agua, dejando que cueza durante media hora más o menos, hasta que la carne quede tierna. Mientras cuece, preparamos la picada. Para ello, trituramos todos los ingredientes en el mortero y, cuando al conejo le queden más o menos 5 minutos de cocción, le añadimos la picada y removemos suavemente para que quede bien ligada.

Montaje del plato.

Colocamos en la mesa la cacerola con nuestro guiso de conejo al vino blanco y servimos una ración a cada comensal según sus preferencias.

Observaciones.

-En el caso de que queráis prescindir del conejo, esta receta también se puede elaborar con pollo.

Esta receta del menú semanal está patrocinada por la sección de cocina de Cosas de Regalo. ¿Quieres prepararla de una manera aún más sencilla? Utiliza nuestros accesorios de menaje.