sto es el no va más. Si llevaba un par de días extrañada por el dichoso agujero que apareció de la nada en el jardín, resulta que ahora se ha tapado como por arte de magia. Pero no creas que ha quedado a nivel del resto de la tierra, como antes de salir el agujero. No, ahora resulta que hay un palo enorme, como si hubiera crecido un árbol a la velocidad que un perro se ventila un filete. Eso sí, por si acaso yo lo marqué esta mañana. Y después vino Orión, pero yo fui la primera.
Y ahora el misterio sí que me tiene desconcertada. Si se hizo un agujero, se llenó de agua, se ha cubierto y ha acabado creciendo un palo… ¿Quién lo ha hecho? ¿Ha venido arrastrándose hasta allí echándose tierra encima con la ayuda de sus supuestas raíces? ¿Ha crecido como una seta? ¿Orión ha enterrado un palo y ha acabado creciendo un árbol? No, todo esto son tonterías, ni un cachorro sin destetar podría creérselas. Entonces… ¿Tendrá algo que ver el ruido que escuché ayer por la noche cuando mi dueño estaba fuera? Sonaba como si alguien estuviera escarbando. Y no me dejaron salir por más que me puse a ladrar. Piensa, Chic, piensa. Aquí está la solución al misterio…